Sabemos que en la crianza el sueño es uno de los aspectos más importantes en su desarrollo. Por eso, la importancia de las siestas no puede subestimarse, así que, ¡es clave no saltear siestas! Vamos a entender por qué hay que respetar el sueño, cómo reconocer las señales de cansancio y cómo evitar el sobrecansancio para acompañar al desarrollo saludable del bebé.
Entendiendo los tiempos, las ventanas de sueño
Tenés que hacer lo posible para que tu bebé duerma cuando tiene que hacerlo, sin superar su ventana de sueño, es decir, el tiempo máximo que puede tolerar despierto antes de que el agotamiento afecte negativamente su sueño. Superar esa ventana puede provocar irritabilidad y estrés.
Sobrecansancio, estrés y cortisol
Cuando un bebé está cansado no solo se vuelve irritable, sino que su cuerpo también responde segregando cortisol, hormona en respuesta al estrés. Este aumento de cortisol puede hacer que conciliar el sueño sea más difícil para el bebé, ya que crea un efecto similar a los de la cafeína. Esto hará que entre en un estado de hiperactividad y que las señales de cansancio casi no se noten.
Reconociendo las señales de sueño
¡Los bebés no son máquinas! Vas a tener que aprender a observar sus gestos y comportamientos para entender sus necesidades, y no llegar al sobrecansancio.
Las señales tempranas son las que idealmente hay que encontrar, el bebé ya se está cansando y está listo para ir a dormir. ¿Qué podés buscar? Cejas coloradas, mirada fija, el bebé voltea la cabeza y los ojos se notan cansados.
Las segundas señales son el momento para no dilatar más llevarlo a dormir, así que cuando veas que bosteza, se frota los ojos, se tira o rasca las orejas y que comienza a estar irritable, ¡llevalo a dormir!
Y, por último, las señales tardías son un recordatorio para estar más atenta/o la próxima vez. El bebé ya está sobrecansado, así que vas a ver que arquea la espalda, se pone rígido, está muy irritable y llora fuerte.
Estrategias para un buen descanso
Para evitar llegar al sobrecansancio, lo mejor es establecer una rutina regular de siestas durante el día (mirá los artículos de nuestro blog sobre siestas). Recordá que es ideal brindarle un ambiente tranquilo para que tu bebé descanse realmente.
Memorizá las señales e intentá no pasarlas de largo, es muy importante respetar su sueño. Entender sus gestos y comportamientos, cómo son sus ventanas de sueño y tener una rutina de siestas es la forma de garantizarle a tu bebé un descanso adecuado y un desarrollo saludable. En mi Instagram siempre comparto experiencias de madres/padres y les doy consejos, ¡podés pasarte cuando quieras a dejar las tuyas para ayudarnos entre todos!