Para muchas familias, el desafío de equilibrar horarios de trabajar y la rutina de sueño del bebé puede generar culpa, dudas e incluso frustración. ¿Qué hacer cuando llegás a casa cerca (o después) de la hora "ideal" para que tu hijo/a duerma? Acá te compartimos algunas ideas prácticas para que esta situación no afecte el descanso de tu bebé ni la armonía familiar.
Lo primero: garantizar el descanso necesario
Antes de preocuparnos demasiado, es importante considerar el panorama completo. Si tu bebé logra dormir hasta más tarde por la mañana y obtiene las horas de descanso necesarias durante la noche, no hay motivos para alarmarse.
Sin embargo, si los horarios nocturnos irregulares no le permiten alcanzar el descanso que necesita, es momento de buscar soluciones.
3 consejos para manejar el sueño del bebé cuando volvés tarde de trabajar
- Hacé de las siestas una prioridad
El sueño diurno no reemplaza al nocturno, pero juega un rol clave en el descanso general. Asegurate de que las siestas sean consistentes y regulares, incluso si eso significa reorganizar la rutina diaria. Mantener siestas sagradas ayudará a evitar el sobrecansancio que puede dificultar el sueño nocturno. - Delegá el momento de dormir
Entiendo que muchas veces queremos mantener el ritual de dormir como un momento exclusivo, pero si tus horarios de trabajar no lo permiten, delegar esta tarea a otro cuidador podría ser una solución. Tal vez algunas noches en la semana papá, una abuela o un cuidador de confianza puede encargarse. De esta manera, reducís el impacto de cualquier "deuda de sueño" acumulada. Algunos comentarios sobre el mal descanso. - Reorganizá los horarios del día
Experimentá con la rutina diurna para evitar que la última ventana de actividad sea demasiado extensa. Ajustar las siestas y actividades del día puede ayudar a que tu bebé no llegue a la noche sobrecansado, lo que facilita el momento de dormir incluso si no estás presente.
Cada familia, una solución diferente
Es importante recordar que no hay una única manera de manejar esta situación. Cada dinámica familiar es única: a veces es mamá quien vuelve tarde, otras papá y, en algunos casos, ambos. Lo más importante es encontrar una solución que funcione para vos y tu familia priorizando tanto el bienestar del bebé como la comodidad emocional de todos los involucrados.
No te castigues si los horarios no son perfectos todos los días. La consistencia general es más importante que la perfección diaria.
Encontrar un equilibrio entre trabajar y el descanso de tu bebé puede requerir ajustes y paciencia, pero con estos consejos y una mentalidad flexible, podés construir una rutina que funcione para toda la familia. En nuestros cursos abordamos todos los temas relacionados al sueño de tu bebé, si te interesa seguir informándote, acá podés elegir el tuyo.